La biopsia consiste en obtener células del área sospechosa de la mama, para que un médico especialista en anatomía patológica pueda analizarlas al microscopio.
¿Cuándo se indica?
¿Para qué sirve?
La biopsia permite determinar con certeza si las células son malignas o no. Si se detectan células malignas, la muestra obtenida por biopsia se analiza para determinar el tipo de cáncer de mama que presenta la paciente.
Se busca si las células cancerosas presentan receptores de estrógeno o de progesterona, cuántos receptores HER-2/neu hay presentes, la rapidez con la que se dividen las células y cuánto se parecen o diferencian las células cancerosas de las células mamarias normales. Los médicos utilizan toda esa información obtenida de la biopsia para establecer el tipo de cáncer de mama y elegir el tratamiento más adecuado para cada caso.
Existen diferentes tipos de biopsia. El tipo de biopsia que va a emplear tu médico depende de varios factores como el tamaño de la zona sospechosa, la localización en la mama o si hay más de una zona para tomar muestras de biopsia.
Durante una biopsia a menudo se toman imágenes para ayudar a los médicos a determinar dónde colocar la aguja y mejorar la precisión. Además, generalmente se coloca un clip para marcar el punto de la biopsia que sirve como referencia para los estudios por imágenes posteriores.